La llegada de un hijo se convierte en uno de los momentos más esperados por una pareja. Sin embargo, en muchas otras ocasiones los niños son traídos por circunstancias fortuitas y no deseadas Según datos de la cuarta Encuesta Nacional de Demografía y Salud, de 2005, realizada por Profamilia, el 21 por ciento de las adolescentes colombianas, entre quince y diecinueve años, hoy está embarazada, lo estuvo en algún momento o ya es madre.
Del total de nacimientos ocurridos de 2000 a 2005, solo el 46 por ciento fue plenamente deseados; el 54 por ciento no lo fue.
Una encuesta realizada a seis mil jóvenes, entre catorce y veintiún años, en seis países de América Latina, incluida Colombia, reveló que solo el 56 por ciento de los adolescentes se protege en sus relaciones sexuales.
Las entidades públicas y privadas, encargadas de capacitar y orientar a las jóvenes en cuanto al cuidado y la planificación que deben tener en el momento en que arriban a una edad fértil, han duplicado sus esfuerzos para lograr que las cifras de madresolterismo en adolescentes disminuyan en Colombia con el pasar de los años.
Dicho trabajo se concentra en las grandes urbes donde las desigualdades sociales, la falta de oportunidades y el limitado acceso a métodos de planificación se convierten en las principales causales para que las aún niñas se conviertan en madres cabeza de hogar.
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